sábado, 15 de diciembre de 2012

Dejen salir antes de entrar


El protocolo me está matando.


Yo estos actos sociales ya los tenía superados e ir a una fiesta de cumpleaños, incluso con mis cinco churumbeles, era pan comido...pero aquí, las normas del juego son otras y yo estoy completamente descolocada.


Resulta que te invitan a un cumpleaños y tienes que llevar comida para compartir. Bueno, vale, a esto ya le hemos cogido el truquillo y ahora vayamos a donde vayamos vamos siempre con un táper lleno... por si acaso.

Eso si, en España, normalmente cuando vas a un cumple infantil no llevas nada de comer. Las medias noches de Nocilla ya las pone la madre del homenajeado. Pongamos que vas a casa de unos amigos y llevas el postre...lo que NO haces es llevarte lo que sobra de vuelta a tu casa. Pues aquí si...vas con tu plato y lo que sobra pa tu casa...O-O


Otra cosa que me resulta muy curiosa es que, normalmente si yo iba a casa de unos amigos y llevaba una tortilla de patata, llegaba y decía "toma, es una tortilla" y ya la anfitriona decidía qué hacer con ella, cómo servirla y demás...aquí NO. Yo llego con mi paquetito y digo "es una tarta para compartir" y tal cual, te dan las gracias y lo ponen en una mesa...pero sin abrir. Y tu piensas, bueno ya lo abrirán, pero no lo abren. Y yo me estreso...y espero...y ...no lo abren!!...y le digo a Papá León "oye, que no lo abren..." "pues ábrelo tu, boba" me contesta él, pero a mi me da apuro ponerme a mangonear las mesas ajenas...así que...
Si tu no lo abres, partes la tarta y la preparas nadie lo prueba de forma que te lo vuelves a llevar entero a tu casa. Este puede ser un buen truco para llevar lo mismo a varios cumples si te coinciden el mismo día, pero vamos yo que pa' esto soy muy española dejo allí mi paquete esperando que en algún momento se lo coman en su casa.
En este mismo orden de cosas, están los regalos de cumpleaños. Tampoco se abren.

Tu llegas, le das el paquetito al niño y los ponen todos juntitos en una mesa hasta que se los llevan a su casa donde los abren en la intimidad. Esta medida no me parece mal, pero me asaltan dos reflexiones:

¿Podrían mis hijos aguantar toda la tarde sin destripar los regalos? Noooooooo 
y por otro lado...
¿como les hago entender a mis hijos que su amiguín no lo va a abrir hasta que llegue a su casa? Le persiguen todo el rato con el regalo y el pobre niño venga a devolverlo a la mesita. Deben de pensar que los españoles somos muy cansinos.

Otra muestra de lo raros que son sus protocolos a veces es que Papá León, se queja de que en la oficina nadie queda para comer...cada mochuelo a su sándwich y rara vez toman un café juntos. Son bastante Juan Palomo. Eso si, llega la fiesta de Navidad se tajan como piojos y al día siguiente se pasan la mañana haciendo y recibiendo llamadas de disculpas por haberle tocado el culo a alguien en la fiesta o haber alabado alegremente algunos pechos ajenos.


Y el protocolo que más me  trae por la calle de la amargura es el empaquetado del súper. Aquí hay tres cadenas de supermercados; Woolsworth (como un Sánchez Romero, todo muy cuco y muy prohibitivo), Coles (parecido al anterior pero tirando más a Mercadona) y Aldi (una especie de Día, el más humilde).


Los primeros días compramos en Woolsworth porque estaba situado debajo de nuestro hotel y en seguida nos dimos cuenta que este no era nuestro sitio, salvo que alimentásemos a los niños a base de fideos chinos.

En Aldi compro algunas cosas que son muy baratas comparadas con el resto, pero hay cosas muy básicas que no tiene y la verdad no estamos tan fastidiados cómo para empezar a consumir "Churricola" en vez de Coca-Cola.
Así que nuestro súper es Coles. En este tienen por costumbre que los cajeros te embolsen la compra, o bien en bolsas de plástico, o bien en las que tu lleves.
Yo suelo ir una vez por semana (al menos) y lleno un carro. Nunca he visto a nadie con un carro lleno... no se si es que van todos los días y por eso compran tan poquito o que viven del aire, pero la realidad es que entre mi prole y su consabida algarabía y mi carro hasta los topes, llamamos la atención.

Como sus compras son tan pequeñitas tienen habilitadas varias cajas rápidas y sólo una para carros grandes, por lo que me suele tocar casi siempre el mismo cajero. Me he convertido en su peor pesadilla. Según me ve llegar empieza a resoplar y un sudor frio le recorre la espalda (o eso creo yo, porque su cara es un poema)


Empiezo a poner la compra en la cinta, mientras mis niños hacen volar la compra por la borda del carro, se esconden huevos kinder por los bolsillos y desordenan las revistas del corazón.

Yo con una mano sigo vaciando el carro y con la otra recompongo el desaguisao, mientras que mascullo que me los voy a comer con patatas, pero para él, esto no es suficiente y nos lanza varias miradas asesinas.


Va apartando artículos de mi compra a su alrededor, porque no estaría bien meter en la misma bolsa los tomates con el Nesquick...Noooooo!! Eso es una aberración!!!! Todo el mundo sabe que hasta que no aparezcan las galletas de desayuno no puede embolsar el Nesquik, de forma que va reservando productos que se le acumulan a la espera de la pareja ideal para ser embolsados y claro el hombre se aturulla porque se queda sin sitio y yo no le doy tregua, ya que si no vacío entero el carro en la cinta no puedo pasar al otro lado a empezar a meter bolsas...pa verle...empieza a farfullar , se desconcentra ¡¡¡Maaaaadreeeeee que nerviosita me pone!!! ...O sea que yo he perfeccionado mi técnica para hacer mi compra en media hora con todos mis pollos y me paso 40 minutos para pagar...amos, amos...


El otro día ya en pleno fregao, cuando el hombre estaba ya a punto de desistir de su tetris mental sobre el embolsamiento ideal, se encuentra que he comprado unas aceitunas a granel, de esas que te ponen como en un taper guarrindongo de plastiquillo y se les ha salido el aceitillo, de forma que cuando ha ido a coger los plátanos se ha pringao entero ¡Casi le da un infarto al buen hombre!...yo viendo ya que nos lo cargábamos y que se había colgao como el Windows y ni pa lante ni pa tras, muy solícita y para aligerar la situación cojo un paquete de servilletas de la cinta y lo abro ofreciéndole un par para limpiarse ¡Pues buena la hice! ¡Casi le pongo la puntilla!...se puso granate y me pareció entender entre espumarajos que no las había pagado todavía y que no las podía abrir y ahora qué?, ahoooraaa qué?, ehhh? Queeeeé???...yo le tranquilicé diciéndole que no pasaba nada, que me las llevaba abiertas sin problema que pa' eso las había abierto yo...naaaaadaaaa, casi le da un parabán...
Creo que ha pedido la baja laboral por estrés...ya os contaré a quien han puesto el Lunes.

Y yo mañana tengo un picnic. Veremos que pasa con la comida para compartir ;-).


De esta guisa salíamos el otro día del supermercado...mu discretos

9 comentarios:

  1. jajajaja grande, grande, GRAAAAAAANDDEEEEEE!!!!

    Tengo que confesar que he llamado a mi mari para explicarle el por qué de la tarta de chocolate en nuestra nevera después de una "fiesta" de cumpleaños con varios extranjeros, y también el por qué nadie más que los españoles se cortaron un trozo. Qué gente!!

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  2. juas juas ... el protocolo es RARO RARO !!! amos amos , lo de la comida y lo de los regalos ^^ xdxd

    pero es que te entiendo tanto, en lo del super jijiji .. tengo currada una tecnica, lo mismo, no tardar mucho mas de 30 minus jajajaja NO PODRIA CON ESE CAJERO !!! :P .... esta comprobado, es una regla de proporcion , mas tiempo = niños mas la lian parda

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    1. Un día de estos le agarro las bolsas y le enseño lo qe vale un peine jajaja

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  3. Hola Mamá Leona,

    No tengo el gusto de conocerte personalmente, pero mira que me da rabia ahora con las risas que me estoy echando con tu blog. Llegué hasta aquí de pura casualidad a raíz de un comentario en la página de Indus (mi chico y yo somos jugadores, él senior en activo y yo retirada del juego pero metida en todos los entresijos ;) y no he dejado de leerte desde entonces. Alucinada me tienes de tus capacidades con cinco churumbeles a las espaldas, yo he tenido el primero hace justo 10 meses y no dejo de recomendar tu blog a mis compañeras de un grupo de mamis primerizas para que veamos que lo nuestro es quejarse de vicio... A ver si a vuestra vuelta te pongo cara, te has convertido en mi nueva ídola. Hasta entonces, encantada de poder seguir vuestras aventuras por esta vía :)

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    1. Hola Silvi!
      Me encanta al final lo pequeño que es el mundo cibernético :-)...os echamos mucho en falta a la familia industrial...tiene güevos que nos vengamos a Australia a echar en falta el rugby!
      A ver si empezamos pronto y os voy contando que tal aqui la afición...
      Me encantará ponerte cara a la vuelta.
      ¡Enhorabuena por tu bebe!
      Besos

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  4. Me gustan vuestras aventuras y cómo las cuenras. Te sigo. Un beso

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  5. jajaja!! absolutamente genial tu adaptación a los protocolos australianos!!!
    me ha encantado el cajero de los carros llenos!! has probado a pasar una bolsa de 3D de matutano vacía???!! yo siempre me como una bolsa mientras hago la compra y luego la paso por la cinta vacía y con sus miguitas...las cajeras del Eroski también me miran raro...pero por honrada!!!

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